Agosto 15, 2023
El 2 de agosto de este año se ha producido el Día de la Sobrecapacidad de la Tierra [1]. El día de la Sobrecapacidad es una fecha que se ajusta cada año el 1 de enero, por parte de la ONG Global Footprint Network. Llevan trabajando con el concepto de Huella Ecológica desde 2003, y hacen estos cálculos para estimar el día exacto en el que la demanda humana consume todos los recursos que el planeta genera en un año. Y en 2023, ya hemos consumido los recursos que deberían durar 12 meses, en menos de 8.
Hemos llegado a un punto en el que esto solo es un indicador más que nos dice como de mal como especie natural estamos comportándonos en el ecosistema, el planeta. En Ecología, hay un concepto conocido como dinámica del equilibrio. Cuando los recursos son suficientes, los consumidores pueden crecer. Una vez se llega a un tope, los recursos no son suficientes para mantener el crecimiento, y se reducirá la cantidad de consumidores. Esto permite a su vez que se recuperen los recursos iniciales. Este ciclo se puede observar en muchas interacciones dentro del mundo natural [2].
El consumo humano lleva creciendo tanto tiempo que no somos capaces de imaginarnos el propósito de nuestra sociedad sin él. Incluso organismos e instituciones que pretenden ser “verdes”, e impulsar la sostenibilidad más que nadie, como la UE, por ejemplo, hablan de la necesidad dedesacoplar el crecimiento económico del uso de recursos y energía” [3]. Ya en el 1973, el renombrado economista Kenneth Boulding respondía a este planteamiento con su famosa cita, “cualquiera que crea en un crecimiento exponencial infinito en un mundo finito es o un loco o un economista” [4]. El crecimiento, y por tanto, el consumo y el consumismo, tienen límites. Hay un tope. Y estamos definitivamente pisando esa línea. Pero no concebimos una sociedad sin consumismo, al parecer.
Los niños cada vez acceden antes a la tecnología. Estamos observando como hay generaciones que nacen sumergidas en un mundo conectado de compras, consumo y estímulos. Se aprecia más claramente en las generaciones más jóvenes, pero los más mayores no están libres ni del daño, ni de la culpa de esto. Hay una desconexión entre la sociedad y la Naturaleza, humano y natural se usan como antónimos, cuando lo primero no puede existir sin lo segundo. Pero la narrativa que impera en las últimas décadas, la que ha criado a las últimas generaciones, autora incluida, no es otra que la que indica que la Naturaleza es algo ajeno a nosotros.
Vivimos sobre ella, pero no como parte de ella. Desde este pequeño, a simple vista nimio detalle, hemos creado toda una filosofía, un fondo en el que hemos educado y nos han educado. Y, sin vernos como parte de una comunidad con las cosas naturales, ¿hasta dónde puede llegar verdaderamente nuestro aprecio por ello?
Aun que la persona en la que se está escribiendo es la primera, hay muchos ejemplos de culturas con una visión del mundo distinta. En algunas culturas Andinas, tratan a los montes, ríos, el aire fresco, o los animales y plantas, como parte de la familia. Les dan nombre, y los cuidan, cómo si realmente fueran familiares [5]. Y son plenamente conscientes de los límites del ecosistema. Un ejemplo más concreto y claro es la comunidad Iroquesa. Bastante antes de que se acuñara el término desarrollo sostenible, ellos ya tenían el llamado Principio de las Siete Generaciones, por el cual, cualquier decisión tomada hoy, debería ser sostenible para las siguientes siete generaciones por venir [6].
El conocimiento y la conciencia que algunas comunidades tienen proviene en gran parte porque están acostumbrados desde el principio de su vida a estar en contacto con la naturaleza. ¿No será esto lo que hace falta introducir en nuestras vidas? Se ha hablado mucho de la necesidad de introducir la tecnología en las aulas, aunque en Suecia – de los primeros en hacerlo –, ya están dando algún paso hacia atrás. La cuestión quizás sea menos la de sacar la tecnología, y más sobre sacar a los niños. Que tengan contacto con el campo, con la vida fuera de lo puramente “urbano”. Que puedan experimentar, asombrarse, y maravillarse, de los pequeños misterios que la Tierra puede ofrecer [7]. Diseñar los programas educativos más enfocados en fortalecer la relación humana-natural, implementar este pensamiento en los objetivos principales, al igual que, en teoría, se implementan los objetivos de crear una sociedad equitativa y justa, podría llegar a tener un gran impacto en la sociedad.
Una vez nos empecemos a percibir como parte de un sistema más grande, de una familia, o de una comunidad, el término que se le dé es irrelevante en realidad, la preocupación por su bienestar vendrá. Y de la preocupación y el cariño, la protección y el vivir respetuosamente con la Naturaleza, vendrá naturalmente.
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REFERENCIAS:
[1] Global Footprint Network (2023, 5 July). This year’s Earth Overshoot Day lands on August 2. Retrieved on 7 August 2023, from https://www.overshootday.org/newsroom/press-release-june-2023-english/
[2] Gurney, W., Nisbet, R.M. (1998, April). Ecological dynamics. Oxford University Press. Retrieved on 6 August 2023, from https://pureportal.strath.ac.uk/en/publications/ecological-dynamics/fingerprints/
[3] European Environment Agency (2021, 11 January). Decoupling economic growth from environmental harm. Retrieved on 8 August 2023, from https://www.europarl.europa.eu/RegData/etudes/ATAG/2020/651916/EPRS_ATA(2020)651916_EN.pdf
[4] Demaria, F., (2018, 22 February). Why economic growth is not compatible with environmental Sustainability. Retrieved on 7 August 2023 from https://theecologist.org/2018/feb/22/why-economic-growth-not-compatible-environmental-sustainability
[5] Tempini, A. (2022, March). Traditional Ecological Knowledge in the Peruvian Andes. Retrieved on 5 August from https://nmbu.brage.unit.no/nmbu-xmlui/bitstream/handle/11250/2998693/tempini2022.pdf?sequence=1&isAllowed=y
[6] CBC News (2021, 22 January). How climate action can benefit from Indigenous tradition. Retrieved on 8 August 2023 from https://www.cbc.ca/news/science/what-on-earth-indigenous-seventh-generation-thinking-climate-action-1.5882480
[7] Carson, R. (1998). The sense of wonder. New York, HarperCollins Publishers
Imagen de portada y vista previa: Niños explorando la naturaleza. Foto de libre uso de Freepik.